A la banda presidencial, la cual es un orgullo para quien la logra y la detenta, los dominicanos le llaman "la ñoña".
Pocas explicaciones se pueden dar sobre el origen de este nombre a un símbolo tan trascendental, si la palabra ñoña, tiene un significado muy heterogéneo que en nada se asemeja a esa pieza tan preciada.
Por ejemplo, la real academia española, expresa que se trata de una expresión para definir cosas de poca sustancia, una persona apocada y de corto ingenio.
¿Y entonces?
Pues desde hace mucho tiempo el léxico dominicano empezó a transformar la palabra ñoña como sinónimo de consentida o malcriada, mimada y mal acostumbrada.
Quizás la banda presidencial merezca ese tipo de trato y por eso la costumbre de un mote que atrae a muchos presidenciables, según el criterio de sus partidarios, en este año 2024.